El autor sabiamente, como quien ha vivido y se siente í ntimamente convencido de lo que dice y desea comunicarlo a los demá s, no habla por sí mismo, sino que escoge y ofrece una viva y sustanciosa muestra de textos de los mismos Padres y Madres con los que, como é l mismo dice, se siente uno cautivado, y nos enseñ an a vivir nuestra vida moná stica, y cercanos, como de nuestros dí as, a los mismos padres. El autor ha encuadrado todo su estudio resaltando las notas fundamentales del Cí ster, en sus orí genes fundacionales y el Cí ster de hoy y de mañ ana, para lo que su servicio como General de la Orden sin duda le ha capacitado extraordinariamente