Todos los animales del rancho Nuevos Brotes ven que a Jack le gusta tener su espacio. Sin embargo, un dí a llega Charlie y no ve a Jackà en absoluto. Y es que aú n se está acostumbrando a ver con un solo ojo. Los dos empiezan con mal pie. Al principio, Jack se muestra nervioso y desconfiado. Pero un dí a se arma de valor y lleva a Charlie a su prado favorito, bañ ado por el sol: Por aquí , Charlie. Y así comienza una gran amistad que las tormentas de la vida pondrá n a prueba, pero que cambiará la existencia de ambos para mejor.