Tras regresar del exilio, Lenin pronunció el 4 de abril en Petrogrado el discurso que dio el pistoletazo de salida a lo que serí a la Revolució n de Octubre. El objetivo estaba claro, conseguir todo el poder para los soviets de obreros y campesinos, y Lenin ofreció las herramientas para conquistarlo. Las famosas Tesis de abril suponen el aná lisis má s lú cido y contundente que se haya hecho sobre los desposeí dos rusos. Son, tambié n, un programa de acció n para una tarea revolucionaria concreta: el paso de la primera etapa de la revolució n, en la que la burguesí a detentaba el poder, a la segunda, en la que, una vez de¡ senmascarados los pequeñ oburgueses y señ alados como traidores a la clase trabajadora, el proletariado y el campesinado tomarí an el poder.