En el proceso de renovació n temá tica y metodoló gica experimentado por la historia, los estudios sobre las mujeres han cobrado especial protagonismo, y entre ellos destacan las investigaciones sobre religiosidad y espiritualidad. Tanto que, en algunos casos, el pasado de las monjas es conocido casi mejor que el de los frailes. Sin embargo, no ocurre lo mismo con las dominicas, pues su memoria escrita quedó desperdigada a causa de los desastres bé licos y las convulsiones polí ticas contemporá neas, que condenaron al olvido a los grandes cenobios monjiles aquí fundados por la orden de Predicadores. El presente libro rescata al má s antiguo de tales establecimientos: el convento de Santa Marí a Magdalena, fundado en Valencia, inmediatamente despué s de la Conquista de Jaime I, y en pie durante seis largos siglos, a los que puso fin la exclaustració n decimonó nica.