'He querido olvidar a aquella chica. Olvidarla de verdad, es decir no querer escribir má s sobre ella. No pensar má s que debo escribir sobre ella, sobre su deseo, su locura, su estupidez y su orgullo, su hambre y su sangre cortada. Nunca lo he conseguido.'
En 'Memoria de chica', Annie Ernaux se sumerge en el verano de 1958, el de su primera noche con un hombre, en la colonia de S, en el Orne. Una noche que le iba a le dejar una marca indeleble, que iba a perseguirla durante añ os. Hasta la valiente decisió n de reconstruirla escribié ndola, ayudada por fotografí as y cartas recuperadas, sumida en una bú squeda: la de sus antiguos amigos y amigas, la de É l, ese primer hombre, pero sobre todo la de sí misma, aquella Annie que tanto le cuesta entender a la Annie actual, en un vaivé n implacable entre el ayer y el hoy.